Un año más, la Asociación Audiovisual Rosalea se siente complacida en organizar este Festival de Cine de Segorbe, en este formato que abre las opciones a todos el público.
El tema principal, como su nombre indica, es la música. Y es que, si algo caracteriza al cine, con una característica tan potente como es la imagen, es todo lo que acompaña a ésta.
Al principio fue la imagen. Quizá las primeras imágenes pintadas al abrigo de las cavernas contaban historias en torno al fuego, representaban los anhelos, los sueños y las peripecias. Luego la imagen fue acompañando al ser humano mientras contaba sus historias y, al final, la imagen se convirtió en cine, en una secuencia continua que contaba una historia de principio a fin. Pero no tenía sonido.
Y eso que el sonido había sido pionero, y con la invención del fonógrafo y la radio y el teléfono, había tomado la delantera tecnológica en la transmisión de información.
La imagen lo cambió todo.
Primero el cine, luego la televisión y ahora Internet ha cambiado el modo en el que el ser humano cuenta historias. Pronto, la multimedia será la manera de escribir lo que antes contaban libros y periódicos.
Y pese a que no se puede concebir el cine sin sonido, al principio fue así. O no tanto. Las películas eran mudas, pero siempre había un piano o una orquestina ambientando las imágenes crudas y desnudas; la banda sonora del cine fue, al principio, en vivo y en directo.
Y cuando, de alguna manera, se consiguió registrar el sonido en el mismo soporte que la imagen, todo empezó de nuevo.
Había empezado el cine sonoro.
La aparición del cine sonoro trajo el sonido, dio la voz a aquellos que nos contaban historias, pero también trajo la música.
En nuestros días, el cine musical es todo un género por sí mismo, y la música en el cine tiene protagonismo por sí sola: bandas sonoras, biopics de artistas famosos y temas que se convierten en hits musicales gracias a la gran pantalla.
Por tanto, este año hemos decidido dedicar nuestro festival a esos aspectos que han impregnado el cine de música, y a la música que ha salido del cine para tener protagonismo por sí sola.
Si buscamos en google un ranking de películas, los resultados nos apabullan. Y no solo por la cantidad: la calidad, los títulos míticos que llevamos impresos culturalmente en nuestra memoria: Grease, La tienda de los horrores, Sonrisas y lágrimas, Moulin Rouge, Footloose, Dirty Dancing, Cantando bajo la lluvia, Granujas a todo ritmo, Cabaret, 7 novias para 7 hermanos, Un día en Nueva York, West Side Story, EL Mago de Oz…la lista seguiría interminable.
Lo mismo ocurre para las bandas sonoras (OST): algunas de ellas han conseguido más fama y repercusión que la propia película, de la mano de compositores míticos como Mancini, Williams o Morricone, o la recopilación de temas musicales de culto, y hay discos (o cintas de cassette para aquellos más viejos) que han marcado, a buen seguro, alguna época de nuestra vida.
Pero nuestra vida actual deja atrás demasiado deprisa todo lo que toca, y muchas de estas películas (u otras que se nos ocurran) ya entran en el terreno de casi la cinefilia, y pretendemos que este, nuestro festival, sea un evento donde todo el mundo encuentre su sitio, no un evento exclusivo para expertos en cine.
Este año son 6 películas para tener presente la música; insuficientes si echamos la vista atrás y vemos todo lo que nos ha brindado el género. Pero de nuevo ofrecemos un cartel con cine actual para todos los gustos. Los niños tienen sus películas infantiles, donde la música adquiere una cuarta dimensión; tenemos cine musical español, la película biográfica de un famoso cantante o musicales al uso en estado puro; todas ellas películas recientes.
También la música tendrá su apartado especial: Jazzinema. Un recorrido musical por el cine, Una banda de cinco músicos interpretarán clásicos del jazz norteamericano y europeo que han sido banda sonora de las grandes películas de la historia. Presentamos un espectáculo en el que mostramos las películas relacionadas con la música jazz, y nos detendremos en aquellas que son importantes, tanto por la música, por el guion, por la dirección o por los actores.
Y este año, si crees que entiendes de cine, vas a poder demostrarlo. Nuestro compañero y monologuista Rafa Forner te invitará a participar en un concurso donde podrás demostrar, delante de todo el mundo, cómo de profunda es tu cultura sobre el cine y la música. No olvides traer el móvil: nuestro concurso usará las nuevas tecnologías para ver quién es el campeón. Recordaremos sintonías míticas del cine, y además, nos reiremos un buen rato con nuestro amigo Rafa.
Esperamos, de nuevo, que el programa preparado este año ofrezca motivos suficientes para que, en esa semana atípica del Pilar, encontremos momentos y excusas para acercarnos al Teatro Serrano, abrir ojos y oídos y, por unos momentos, evadirnos de la realidad y reír, soñar, volar y bailar de la manos del cine y su música.